domingo, 8 de noviembre de 2015

Liturgia ortodoxa en Izalco: aristas de la complejidad del encuentro interidentitario


Por Roberto López-Geissmann h.
  Introducción
El sábado 20 de junio del año en curso (2015), a las 10:25 am, se llevó a cabo en la ciudad de Izalco, una divina liturgia ortodoxa, ante la presencia de un grupo reducido de concurrentes. ¿Qué había detrás de esta celebración ritual religiosa? ¿Quiénes se interesaron en realizarla y por qué motivos? ¿Tiene Izalco y la iglesia donde se celebró alguna importancia simbólica para que se haya efectuado allí? ¿Se cumplieron las expectativas de las partes involucradas en la realización de este evento? ¿Ha sido esta experiencia ocasión de aprendizaje para sus realizadores e  incluso, podría convertirse en  motivo de reflexión para quien la conozca a través de estas líneas? Todo este texto se dedicará a intentar responder a estas interrogantes, así como a ventilar otros puntos de interés relacionados a este acontecimiento.
Comenzaremos por brindar algunas generalidades acerca de Izalco y de la iglesia donde se celebró la liturgia, para posteriormente abordar los preparativos para este evento y el resto de aspectos que ya propusimos a manera de preguntas por contestar.

domingo, 31 de mayo de 2015

Peregrinación y Vigilia por la beatificación de Mons. Romero

Por Roberto López-Geissmann h.

Con grandes expectativas de adentrarme en las experiencias y sentir de multitud de personas que estaban por dar inicio a la celebración de la beatificación de Mons. Óscar Arnulfo Romero, me encontraba a las 5 de la tarde del viernes 22 del mes presente, aun en la Basílica del Sagrado Corazón de Jesús, terminando de preparar mi guía de preguntas para las entrevistas que tenía previsto realizar en estos eventos celebrativos.

Un cielo gris y una brisa húmeda me avisaban que debía darme prisa para unirme a la Peregrinación que en ese momento tenía que estar saliendo desde la Catedral capitalina. Pero las nubes no se mostraron pacientes y apenas me dieron tiempo para caminar menos de dos cuadras y guarecerme en la fachada del Pollo Criollo de la Calle Arce  antes de que derramaran copiosas lágrimas pluviales. ¿De tristeza? ¿De alegría? Cada quien sabrá responder. Lo cierto es que la lluvia prolongada no fue obstáculo para miles de salvadoreños y decenas de extranjeros que se unían para honrar la figura del Arzobispo asesinado hace más de 30 años.